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Un paramilitar de origen cubano admitió que fue contratado por el gobierno sandinista para participar activamente en la denominada «operación limpieza».
«Fui contratado por ellos, mi salario es de 200 dólares diarios, nosotros llegamos desde Cuba en Mayo, entramos al país por el aeropuerto internacional, con el mayor sigilo posible», afirmó.
Los estudiantes que estuvieron atrincherados en la Universidad Nacional de Managua, advirtieron que el acento de los paramilitares no era nicaragüense, sino que cubano.
«Decido abandonar esta misión, debido a que no me han cancelado los últimos 8 días de trabajo», advirtió el señor de unos 38 años proveniente de La Habana.
Nicaragua vive una grave crisis socio-política desde el pasado 18 de abril, cuando iniciaron las protestas en contra de las reformas a la Seguridad Social.
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